En la calle Segovia 17, en el barrio de La Latina en Madrid se encuentra este pequeño lugar de culto a ese manjar tradicional de madres y abuelas, la croqueta. Recomiendo ir en transporte público ya que la zona no es de fácil aparcamiento, en caso de ir en coche se puede dejar en el aparcamiento público que hay en la Plaza de la Cebada. Otra recomendación es reservar con tiempo. Yo conseguí reserva en el mismo día para cenar, pero el resto de la semana estaba completo.
El local es muy pequeño, no habrá mas de ocho o diez mesas. La decoración es en colores claros que contrasta con el oscuro de las mesas. El techo abovedado. Llegamos los primeros, un poco antes de las nueve y aun estaba cerrado, llamamos y la camarera muy amablemente nos invito a pasar y a elegir mesa. Al darte la carta te explica en que consisten los platos, cantidades, y las sugerencias de la semana que no aparecen en la carta.
Con las bebidas te ponen un aperitivo. En nuestro caso consistía en tempura de langostino con salsa de chiles. Sencillamente delicioso. La cerveza es Brabante. Esta cerveza de origen belga y empresarios españoles empezó a comercializarse en 2009 y esta teniendo un fuerte crecimiento. Sobre todo en Madrid.
La especialidad no podía ser otra que la croqueta. Hay croqueta de sepia en tinta gratinadas, de sobrasada con chocolate, de lacón con queso de cabra y nueces... Nosotros no arriesgamos mucho. Optamos por la croqueta de la semana, que era de jamón de pato y foie y otra de mejillón tigre, ambas estaban muy buenas. Hay tanta variedad que te quedas con ganas de pedir mas, habrá que repetir.
Como segundo pedimos el tiradito de pez mantequilla marinado, aceitunas negras y rucula y hamburguesa de canguro. Era la primera vez que comía pez mantequilla y como suele pasarme con los marinados me gusto bastante. La hamburguesa de canguro en cambio no me convenció, la carne estaba demasiado hecha, me imagino que por el tipo de carne. Últimamente se ha puesto de moda hacer hamburguesas de todo tipo de carnes y cuanto mas exóticas mejor. Parece que a la gente le gusta eso de poder decir que ha comido hamburguesa de cocodrilo o de avestruz. Es una propuesta original, pero en muchos casos el resultado no es el mejor desde el punto de vista de la calidad. En mi opinión prefiero que la carne de la hamburguesa sea de ternera, de buena calidad y no muy hecha. La originalidad se puede aportar en los complementos y no sacrificar la calidad de la carne.
De postre hay propuestas muy interesantes como la croqueta de chocolate, cuajada de chocolate blanco con infusión de frutos rojos y praliné o la crema ligera tostada con platano y chocolate crujiente. La próxima vez que vaya prometo dejar sitio y probar alguno.
Los domingos preparan arroces como el arroz negro de calamares y langostinos. Nos aconsejaron que probásemos la lasaña de confit de pato con bechamel de naranja y especialmente la cazuelita de fideuá en costra, pero ese día no les quedaba.
Como conclusión, la Gastro-Croquetería de Chema es un rincón con encanto en el barrio de La Latina. Perfecto para una cena tranquila/romántica con tu pareja. Decoración agradable y servicio exquisito. Comida original y bien elaborada. Un sitio al que me gustaría volver.
De precio las croquetas (se sirven por pares) suelen rondar los 3,2 euros. El tiradito de pez mantequilla 8,25 y la hamburguesa por el estilo. En total pagamos unos 30 euros bebiendo tres cervezas en total.
No tienen página propia en internet. Se puede reservar a través de www.eltenedor.es. También tienen facebook donde podéis ver mas fotos de sus platos.
Un saludo.
El local es muy pequeño, no habrá mas de ocho o diez mesas. La decoración es en colores claros que contrasta con el oscuro de las mesas. El techo abovedado. Llegamos los primeros, un poco antes de las nueve y aun estaba cerrado, llamamos y la camarera muy amablemente nos invito a pasar y a elegir mesa. Al darte la carta te explica en que consisten los platos, cantidades, y las sugerencias de la semana que no aparecen en la carta.
Con las bebidas te ponen un aperitivo. En nuestro caso consistía en tempura de langostino con salsa de chiles. Sencillamente delicioso. La cerveza es Brabante. Esta cerveza de origen belga y empresarios españoles empezó a comercializarse en 2009 y esta teniendo un fuerte crecimiento. Sobre todo en Madrid.
La especialidad no podía ser otra que la croqueta. Hay croqueta de sepia en tinta gratinadas, de sobrasada con chocolate, de lacón con queso de cabra y nueces... Nosotros no arriesgamos mucho. Optamos por la croqueta de la semana, que era de jamón de pato y foie y otra de mejillón tigre, ambas estaban muy buenas. Hay tanta variedad que te quedas con ganas de pedir mas, habrá que repetir.
Como segundo pedimos el tiradito de pez mantequilla marinado, aceitunas negras y rucula y hamburguesa de canguro. Era la primera vez que comía pez mantequilla y como suele pasarme con los marinados me gusto bastante. La hamburguesa de canguro en cambio no me convenció, la carne estaba demasiado hecha, me imagino que por el tipo de carne. Últimamente se ha puesto de moda hacer hamburguesas de todo tipo de carnes y cuanto mas exóticas mejor. Parece que a la gente le gusta eso de poder decir que ha comido hamburguesa de cocodrilo o de avestruz. Es una propuesta original, pero en muchos casos el resultado no es el mejor desde el punto de vista de la calidad. En mi opinión prefiero que la carne de la hamburguesa sea de ternera, de buena calidad y no muy hecha. La originalidad se puede aportar en los complementos y no sacrificar la calidad de la carne.
De postre hay propuestas muy interesantes como la croqueta de chocolate, cuajada de chocolate blanco con infusión de frutos rojos y praliné o la crema ligera tostada con platano y chocolate crujiente. La próxima vez que vaya prometo dejar sitio y probar alguno.
Los domingos preparan arroces como el arroz negro de calamares y langostinos. Nos aconsejaron que probásemos la lasaña de confit de pato con bechamel de naranja y especialmente la cazuelita de fideuá en costra, pero ese día no les quedaba.
Como conclusión, la Gastro-Croquetería de Chema es un rincón con encanto en el barrio de La Latina. Perfecto para una cena tranquila/romántica con tu pareja. Decoración agradable y servicio exquisito. Comida original y bien elaborada. Un sitio al que me gustaría volver.
De precio las croquetas (se sirven por pares) suelen rondar los 3,2 euros. El tiradito de pez mantequilla 8,25 y la hamburguesa por el estilo. En total pagamos unos 30 euros bebiendo tres cervezas en total.
No tienen página propia en internet. Se puede reservar a través de www.eltenedor.es. También tienen facebook donde podéis ver mas fotos de sus platos.
Un saludo.
Añado algo de información del "pez mantequilla", para mí hasta hoy desconocido.
ResponderEliminar"El Pez Mantequilla (Butterfish) es un pescado muy utilizado en la cocina Japonesa. Se trata de un pescado blanco de agua salada, algo graso, de carne blanca y sabrosa, su textura es firme pero delicada, y esto permite degustarlo crudo, especialmente en Sahimi o en Niguiri Sushi".
(Tomado de "ellaboratoriogastronomico").
Habrá que probarlo...